lunes, agosto 27, 2007

"Nosotras conocemos la esencia. Ellos conocen los conceptos. A menudo, ambas cosas no coinciden". En La mujer justa, de Sándor Marai.

¡Cuánto se deja atrás por poner denominaciones, por juguetear con las palabras, por hacer de cada oportunidad una manifestación del lenguaje, por deleitarse con la lírica!

3 Comments:

At 1:21 p. m., Blogger Eloy S said...

Esa sería una de las conclusiones que he sacado de Caótica Ana. La otra, que ellas son vida y nosotros, muerte.

PD:Te lo recomiendo, Fernando.

Otro abrazo.

PD2:Lo de Argentina se pospuso por contrato en obra y servicio de mi "ella". Aunque sé que esas tierras, las Américas me llaman...y yo contestaré su llamada encantado.

 
At 1:21 p. m., Blogger Eloy S said...

Te recomiendo la peli, que me expresé mal...

 
At 4:45 a. m., Anonymous Anónimo said...

Hombre y mujer diferentes en algunas cosas e iguales o parecidos en otras. Lo fascinante es que nos complementamos, el complementarse.

 

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