Y mañana... Fito
Llega el momento. Expectación. Día de concierto. Fito y los Fitipaldis. ¿Nervios? ¡Ni que fuera a subir yo al escenario!En el fondo, no quiero cambiar
En el fondo, sabes, nena, no quiero cambiar
Porque todo se me olvida
cuando empezamos a tocar
Pero una cierta emoción sí que aparece. No deja de ser uno de esos músicos que inspiran y que hacen más llevaderas las mañanas y las noches.
No sé cuanto tiempo habré perdido.
Vivo tan deprisa que se cae de los bolsillos.
A pesar de todo he aprendido
si la noche es clara a la luna se le ve el ombligo.
¡Mira que a la luna se le ve el ombligo!
Allá que vamos. Cerveza, risas, bailes, mecheros arriba, mecheros abajo, abrazos, más risas y cervezas. Sólo faltan los besos.
La noche yo y tú la luna,
tú la cerveza y yo la espuma.
Se me ponen si me besas
rojitas las orejas
Los hay que consideran que el Cabrales se ha convertido en un gruyere desde que dejó a Platero. Otros piensan que su aceleración a lo fitipaldi ha sacado a un letrista excelso. Bueno, puede ser. Qué más da.
A través de mis orejas discutiendo a pleno grito
El demonio a mi derecha y a la izquierda un angelito
Demasiado acelerado, nunca encuentro mi destino
Yo no sé si mis zapatos durarán todo el camino
Además, un tipo que es capaz de reinventarse sin perder calidad, ni ironía, ni buen gusto componiendo tiene mi admiración. Admiro su legalidad, su autenticidad, su humildad. Igual luego me decepciona, pero, por ahora, no.
Dime tú qué puede saber
alguien que ha pasao la vida
buscando la melodía
(...)
Perdona, tengo cosas que hacer
que aún me queda media vida
pa´encontrar la melodía
pa´encontrar la melodía
De todas maneras, a ver qué me encuentro mañana. Ocurre que llevo varias semanas escuchando su último trabajo en mi MP3 y en esas que sale el músico frustado que soy y se monta su concierto particular en mi imaginación con los temas que oigo. "Así la tocaría yo". "Este solo lo haría más largo". "Aquí me encendería un pitillo". "En esta saltaría con rabia".
Una paranoia más.
Seguramente me sorprenderá de la misma forma que lo hizo la primera vez que vi en un escenario a Tahúres Zurdos, con la voz y la personalidad de Aurora Beltrán desatada en la maravillosa El chico de la mirada asustadiza o en Una noche de amor.
escrito por folabe @ 7:45 p. m.
5 Comments:
EYYYYY!!!! ¿nos veremos por alli?? Puede...jejeje. Ya compartiremos impresiones sobre el maestro. Besos.
(Un día después). Hubiera sido increíble que nos viéramos entre toda esa marea ingente de seguidores: desde niñas bien hasta rockeros de pura cepa, pasando por un equipo de waterpolo.
Además, podríamos haber comparado versiones de lo allí escuchado: a mí me dejó con la miel en los labios, hubiera preferido algo más de ritmo y no tanto parón entre tema y tema.
Asimismo, hubiera agradecido que las canciones del último trabajo (excepto dos) se las hubiera trabajado un poco más, que no sonaran igual que en el cd.
Me da la sensación de que sólo al final del concierto se soltó.
Habríamos hablado de todo esto delante de una buena cerveza. Y seguro que hubiera conocido a tu "guacho".
Un abrazo.
De acuerdo con todo lo que dices. El otro día me dijo Juanjo que lo entrevistó para el periódico y me sorprendió muchísimo su definición de cantatautor español: "Un UGT con guitarra". Qué crack. Saludos
Muy bueno, Juan. Es que cuando se aleja de Azorín y Vargas Llosa le sale el alma de periodista, que es enorme.
Un día habrá que escribir una entrada sobre su atormentado debate interior entre la prensa y la literatura. Creo que si fuera más alto, su inquietud sería mayor.
Menos mal que es un... ¿Cómo le llamaba el "power"?
Un pocapeste, un perro sarnoso... Son muchos los motes. Un día te los cuento todos al calor de una cerveza bien fría.
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